¡Bienvenidos a mi nuevo blog! Espero que este post sea el primer capítulo de una larga secuencia de delirios místicos causados por el insomnio y la falta de televisión por cable.
Mi otro blog falleció de senectud. Las personas para las que se escribía simplemente han ido dejándome, y como el reflejo en un espejo ha desaparecido cuando el objeto reflejado se ha marchado. Pero el ciclo eterno de dolor, muerte, resurreción y más dolor continúa. ¡Y estamos muy lejos del Nirvana! Así ha nacido este blog del cadáver del anterior, listo para sufrir por los pecados del occiso.
Esta vez, no postearé solamente microcuentos. Intentaré postear además una que otra opinión de la realidad ruidosa que me rodea, alguna ocurrencia de mi gato Aristóteles. Incluso tengo previsto empezar alguna blogonovela, que espero los atrape y se convierta en una obra de culto que me llene de guita.
Bueno, eso es todo por ahora. Gringewald se despide de todos los hombres en la buena Tierra. Buenas Noches y Buena Suerte (aunque ya es de día).
Cara Berlangganan WeTV
Hace 1 año